lunes, 22 de agosto de 2011

El Burrero

Hoy es uno de esos días que aunque es lunes huele a sábado.
Me he levantado esta mañana y desde mi ventana se podía oler el mar... ese mar con yodo de esa playa que unos iluminados estropearon ya hace bastante tiempo. A mi memoria han llegado recuerdos de días de viento, de mar, días de cholas de plástico, de juegos en la avenida mientras los aviones sobrevolaban nuestras cabezas. He recordado como nos engañaban diciendo que la digestión duraba cuatro horas, que el potaje era pesado y que había que quedarse sentado esperando. He recordado los charcos de enfrente de mi casa, el pequeño dique con el que me protegía del viento y los bocadillos de "tulip"en la orilla del mar. Antes la arena no molestaba, la gente se sentaba en la calle a hablar y a tomarse el café;  la brisa olía a mar y las cholas de plástico eran parte de nuestro día a día. Qué buenos momentos me traen las "calamares"... todo el día puestas, no nos la quitábamos hasta que su marca no estuviera sellada por el sol en nuestra piel.
Esa era la verdadera playa del Burrero o por lo menos la que a mi me gustaba; una playa de callao y arena rubia. Me gustaba el Burrero en el que la Aguaiza, el Charco del Cura, la Bartola y la Cuna no estaban sepultados por toneladas de arena y donde el dique sur esperpéntico no existía. Me gustaba el Burrero de las historias, de los mitos, "la playa en la que se hundió un barco y aún hoy hay un tesoro escondido", como decía mi maestro de gimnasia. De eso ya nada existe, tiene que soplar muy fuerte el viento para que se lleve toda la arena y vuelva a dejar mi playa como estaba.

¡Qué pena de playa pero qué buenos recuerdos!







3 comentarios:

  1. Tienes que ver una foto que tengo en mi casa de el auntentico Burrero, acuerdate del puente de madre que se caia a trozos que era todo un reto cruzarlo, el bar piscina con los pescaos dentro de la piscina, las montañas de arena rubia y las casa con las puertas sepultadas de tanta arena con sus terrazas siempre llenas de gente, ¿en donde estará todo eso? en nuestros recuerdos.

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  2. Sí Noe!! me acuerdo!! que penita, pero bueno cómo dices tú ese Burrero sigue vivo en nuestro recuerdo y no podemos olvidarlo! Un besazo

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  3. Sí señor!! Tremenda prima que tengo! Desde ahora me pasaré de vez en cuando por tu blog para leer tus pensamientos. Me gusta mucho todo eso de El Burrero, son recuerdos preciosos que nunca nos quitarán. Un beso. Tu primo Jose.

    Un reto.... escribe algo sobre lo que sientes cuando te tomas un trago de Clipper de fresa al comer Sancocho con mojo rojo, jejej divertido!!

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